
En estos últimos años, muchas veces escuchamos decir “contra los equipos brasileños es imposible competir”, “contra la plata que tienen en Brasil no se puede”. Y es innegable que los brasileños corren con una fuerte ventaja desde el plano económico, con grandes figuras que llegan de Europa, incluso también muchos que se destacan en el fútbol argentino se van para allá.
Pero no es imposible, en Argentina hay clubes que no tienen miedo de enfrentarse aún en la desventaja monetaria, que no temen a ir de visitante y vuelven con buenos resultados, que demuestran que unidos y con convencimiento, se puede. Hoy Racing es quien tomó la bandera argentina y le hace frente a los brasileños, les juega sin miedo, los domina y les gana partidos, series y finales.
En los últimos meses Racing coronó versus los de Brasil, con varias rondas de Sudamericana contra ellos y la Recopa ante el campeón de Libertadores y campeón del Brasileirao. Pero la Academia logró concretar en títulos algo que no viene sólo desde 2024. Desde 2016, todos los años hubo rivales del país vecino en las distintas competiciones, duelos de eliminación y también en fases de grupo.
Al principio asustaba ver un cuadro con las potencias de Brasil, o una fase de grupo con alguno de ellos, pero ya no es así. Durante estas diez temporadas enfrentándolos hubo triunfos y derrotas, series ganadas y perdidas, pero aún en las derrotas, nunca hubo una gran superioridad de alguno de los brasileños. Racing estuvo siempre a la altura, ganó varias veces con autoridad, goleó, e incluso en un par de oportunidades eliminó al “cuco” del torneo.
Allá tendrán mucha plata para lucirse en el mercado de pases, pero Racing tiene un amor propio y un convencimiento que se impone sobre los billetes. La Academia demuestra que el fútbol argentino puede, y estoy seguro de que a ninguno de los brasileños le entusiasma saber que su rival es Racing, lo respetan cuando vienen al Cilindro y cuando lo reciben en sus tierras, y eso se lo ganó.
Racing es campeón otra vez, alzando la bandera celeste y blanca y cortando con el dominio de Brasil en el continente. ¡Salud, Academia! ¡Salud, campeón! que la alegría no es sólo brasileña, cada vez festejan menos, y cada vez más seguido se van escuchando “siga el baile, siga el baile”, como anoche en Río de Janeiro.
✍️ Fernando ‘Chicho’ Ferreira – @racing.pedia