El Análisis: Inflador anímico

Varios de los jugadores que muestran poco tienen capacidades. Se necesita urgente un golpe de confianza para plasmar otras cosas en cancha.

Reinaldo Merlo dijo en conferencia de prensa que venía a Racing porque tiene «buenos jugadores». Los dos puntos que se consiguieron de 33 posibles hacen replantear ese pensamiento a cualquiera. A su vez, la mayoría de esos jugadores son los mismos que hicieron una campaña interesante en el Clausura 2013. Entonces ¿cuál es el verdadero Racing?

Hay algunos buenos jugadores, al menos para no ir últimos cómodos como estamos. Sebastián Saja es indiscutible desde todo punto de vista. José Luis Gómez es un gran proyecto. Tiene desborde, buen pie. El centro con tres dedos previo al remate desviado que hizo Claudio Corvalán el domingo fue exquisito. El gol en contra ocurre justamente por hacer lo que muchos laterales no realizan, cerrar espacios. Bruno Zuculini es un valuarte en el mediocampo y rueda de auxilio necesaria para Agustín Pelletieri. Rodrigo De Paul alterna buenas y malas, aunque las malas sean muy malas. Y Luciano Vietto se lo puede criticar por el momento y la falta de gol pero es el único que produce algo en materia de ataque.

Los problemas están en la zaga central donde el rendimiento de todos es muy bajo y no hay recambio. La falta de presencia en producción de juego asusta. Diego Villar no aporta nada en ataque. Gabriel Hauche es intrascendente. Urge la vuelta de Valentín Viola. El que tuvo un buen rendimiento en su momento y hace varios partidos que no juega fue Luis Ibáñez.

Lo que si hace falta es un golpe anímico importante, sea una victoria, la llegada de un motivador como Merlo o lo que sea. El equipo está sin alma, no cree en si mismo. Necesita una renovación ya. Muchos de estos jugadores pueden mostrar otra imagen pero es determinante que su mentalidad cambie.

Por Gabriel Espósito / @GEsposito85